Gobierno de Gibraltar
Declaración en el Parlamento del Ministro Principal sobre las negociaciones del Brexit
Gibraltar, 22 de noviembre de 2018
Presidente, a pesar de la actual polémica sobre los asuntos relacionados con Gibraltar, ayer volví, con el equipo del Gobierno para el Brexit, de Madrid, donde negociamos los detalles definitivos del paquete de medidas que aplicarán a Gibraltar en el marco de nuestra salida de la Unión Europea junto con el Reino Unido.
Esta mañana, he informado al respecto al Consejo de Ministros y a los miembros del Comité Selecto sobre el Brexit (Brexit Select Committee).
Mi intención es realizar una Declaración Ministerial detallada a toda la nación sobre la naturaleza y el efecto de estas medidas relativas a Gibraltar en algún momento de la semana que viene. Para ese momento, espero, el Consejo Europeo que se celebrará el 25 de noviembre de 2018 habrá alcanzado un acuerdo final sobre el borrador del Acuerdo de Salida y la Declaración Política, que acaban de publicarse y establecen el marco para la futura relación entre la UE y el Reino Unido.
Hoy actualizaré al Parlamento sobre el progreso que hemos realizado en las negociaciones de esta semana en Madrid y en la reunión celebrada con la Primera Ministra en Downing Street la semana pasada.
Presidente, el Acuerdo de Salida incluye un Protocolo sobre Gibraltar que se basa en varios Memorándums de Entendimiento y un Tratado Fiscal que apuntalarán la ejecución del Protocolo.
Estos son los documentos que hemos estado negociando.
Y hoy me enorgullece informar de que el acuerdo sobre todos estos documentos está ahora prácticamente concluido, sujeto a un acuerdo político final por parte de ambas partes.
El trabajo de las negociaciones de fondo sobre todos los asuntos ha concluido.
Los cuatro Memorándums de Entendimiento se centran en los derechos de los ciudadanos, el acceso al mercado del tabaco, la cooperación en asuntos medioambientales y la cooperación en asuntos policiales y aduaneros.
El Tratado Fiscal establece disposiciones sobre la transparencia fiscal y normas relativas a la residencia fiscal similares a las que normalmente incluyen los acuerdos de doble imposición o de intercambio de información como los que tenemos con muchos países de todo el mundo y que llevamos mucho tiempo queriendo tener con España.
Todos los Memorándums de Entendimiento —excepto el Tratado Fiscal y el Memorándum sobre los derechos de los ciudadanos— establecen obligaciones únicamente hasta el final de diciembre de 2020.
Es decir, estos acuerdos estarán en vigor únicamente durante los 21 meses del denominado periodo de transición, entre marzo de 2019 y diciembre de 2020. A no ser que acordemos lo contrario, en ese momento quedarán inefectivos.
Todos estos documentos son el resultado de una negociación larga e intensa que se ha extendido durante prácticamente todo el año.
Ninguno de estos documentos pone en peligro nuestras líneas rojas.
Tampoco alteran de forma alguna nuestra Constitución y nuestras competencias constitucionales.
No se han realizado —ni se realizarán— concesiones en los planos de soberanía, jurisdicción o control.
De hecho, se trata de acuerdos que se han logrado expresamente sin menoscabo de ninguna de las posiciones sobre la soberanía.
Del mismo modo, estos documentos tampoco nos exigen que hagamos cosas con las que no estamos de acuerdo. Puedo garantizar a todos los miembros que los términos de los Memorándums están muy lejos de las disposiciones que a muchos les habría gustado que contuviesen.
Actualmente estamos trabajando en la comprobación de los aspectos legales y de coherencia de los documentos y en la necesaria traducción de los mismos, y estamos convencidos de que estarán listos para su aprobación política final el domingo.
Esto significa que, si en el Consejo Europeo extraordinario del domingo se alcanza un acuerdo final entre los 27 de la UE y el Reino Unido, ello conllevará que los términos que establecen que Gibraltar formará parte del Acuerdo de Salida han recibido el visto bueno y el Peñón se beneficiará del periodo de transición.
Este aspecto es lo que estaba en juego en esta fase de las complejas negociaciones sobre el Brexit.
Y esto es lo que estamos a punto de conseguir.
Presidente, nuestro objetivo para la primera fase de las negociaciones del Brexit era garantizar la continuidad del acceso al mercado británico, algo que logramos en octubre del año pasado.
Ahora estamos a punto de lograr nuestro objetivo para la segunda fase de las negociaciones del Brexit, es decir, nuestra inclusión en el Acuerdo de Salida y el Periodo de Transición.
Resulta sumamente importante que tengamos en cuenta que, si no quedábamos incluidos en el Acuerdo de Salida, en marzo de 2019 Gibraltar se hubiera tenido que enfrentar por su cuenta al precipicio [de una salida de la UE sin acuerdo].
Es decir, la legislación comunitaria habría seguido aplicando al Reino Unido durante un periodo de transición hasta, al menos, diciembre de 2020, pero no a Gibraltar.
Presidente, este no era el resultado que queríamos. Habría generado incertidumbre para las empresas y los ciudadanos.
Por tanto, puedo informar a la Cámara con gran satisfacción de que, independientemente de las amenazas a las que hemos hecho frente, los importantes desafíos que hemos abordado y a las reclamaciones de algunos que sugerían que el Brexit constituía para España la mejor oportunidad de los últimos 300 años para hacerse con la soberanía de Gibraltar, o al menos parte de ella, Gibraltar estará, a pesar de todo, incluido en cualquier Acuerdo de Salida y el Periodo de Transición, si lo hubiera.
Esto garantizará un periodo de certidumbre legal fundamental para las empresas y ciudadanos que durará, al menos, hasta el 31 de diciembre de 2020, y durante el que se negociará la futura relación entre el Reino Unido —incluido Gibraltar— y la UE.
Los Memorándums de Entendimiento y el Tratado Fiscal estarán acompañados de otros muchos documentos, cartas y declaraciones políticas que también se están concluyendo en este momento.
Todos estos documentos forman parte de un único paquete que debe leerse e interpretarse como tal.
Los explicaré en detalle en mi Declaración Ministerial cuando se hayan concluido y los 27 de la UE y el Reino Unido hayan alcanzado un acuerdo sobre el proceso de salida.
Hay otros dos puntos en los que me gustaría incidir:
En primer lugar, durante esta semana, el Gobierno de España ha expresado públicamente su reticencia sobre el tratamiento que ha recibido Gibraltar en relación con un aspecto del Acuerdo de Salida.
Se trata del Artículo 184 del Acuerdo, que, según la interpretación de España, compromete el papel que desea desempeñar a la hora de determinar cómo afectará la futura relación entre el Reino Unido y la UE a Gibraltar.
Dejemos claro que esto no tiene nada que ver con lo que hemos estado negociando, es decir, los términos de la situación especial de Gibraltar en el Acuerdo de Salida y nuestra inclusión en el Periodo de Transición, y no los términos de la futura relación con la UE; esto no es lo que hemos estado negociando en esta fase.
De hecho, aquellos que critican al Gobierno de Gibraltar por no haber obtenido ahora un acuerdo más duradero y permanente para Gibraltar en este punto de las negociaciones siguen sin entender en absoluto cómo se están llevando a cabo las negociaciones del Brexit y cómo deben interpretarse los textos legales.
Tal vez los acontecimientos de las últimas 72 horas hayan contribuido a aclarar este punto.
En segundo lugar, los Memorándums de Entendimiento y el Tratado Fiscal que hemos estado negociando apuntalan la ejecución del Protocolo de Gibraltar, que forma parte del Acuerdo de Salida.
Por tanto, son el resultado de los requisitos contenidos en el Acuerdo de Salida.
El Acuerdo constituye un Tratado de la UE, por lo que resulta legalmente vinculante en virtud de la legislación internacional suscrita por los Estados miembros. Gibraltar no es constitucionalmente, y no puede serlo, una de las partes del Acuerdo.
Dicho esto, es importante que el Protocolo y los Memorándums de Entendimiento se interpreten según el sentido expresado el Considerando 2 del Protocolo, que establece que este se implementará de conformidad con los órdenes constitucionales correspondientes del Reino Unido y de España.
Así, se reconoce que el Gobierno de Gibraltar disfrutará de los derechos y asumirá las obligaciones que se establecen en el Protocolo y los Memorándums de Entendimiento en virtud de las disposiciones de nuestra Constitución.
Este extremo se vio confirmado expresamente en mi reunión con la Primera Ministra en Downing Street la semana pasada.
Por tanto, no se nos ha impuesto nada y no se hará nada que no respete nuestra Constitución.
Todas las obligaciones contraídas, ya sea en virtud del Protocolo o de los Memorándums de Entendimiento relativos a Gibraltar, se han negociado por parte de Gibraltar y el Reino Unido de forma conjunta.
Se trata de obligaciones contraídas únicamente como resultado del consentimiento expreso del Gobierno de Gibraltar.
El Gobierno es tan guardián de la Constitución como puede serlo esta Cámara o el poder judicial.
No habríamos tolerado ningún acuerdo que hubiera comprometido nuestro Orden Constitucional de alguna forma.
Presidente, si asumimos que el resto de obstáculos quedan resueltos, ahora debemos empezar a pensar de forma más exhaustiva en cómo debería ser nuestra relación futura con la UE tras la salida.
En gran medida, se trata también de establecer cómo queremos que sea nuestra relación con España, nuestra vecina, después de nuestra salida de la Unión.
Nunca hemos cuestionado que, en términos geográficos, tenemos acceso a Europa principalmente a través de España.
Nuestra puerta geográfica a Europa es España.
Por tanto, de facto, tenemos más motivos para cooperar y negociar con España que con cualquier otro país de la UE.
Así, nuestro deseo es continuar las negociaciones sobre el futuro y trabajar directamente con España con el mismo espíritu de colaboración y participación positiva que hemos disfrutado en esta fase de las negociaciones del Acuerdo de Salida.
Nadie debería pensar que interpretamos ninguna parte del Acuerdo de Salida de modo que nos pudiera alentar a evitar esta realidad genuina, humana y política. No necesitamos un veto para sentarnos a la mesa a negociar.
Demasiadas veces, Presidente, Gibraltar y su pueblo han quedado relegados a un segundo plano ante la maraña de teoría jurídica internacional.
Y en este momento crítico de la historia de Europa, Gibraltar puede ser el cimiento más sólido sobre el que construir la futura relación entre el Reino Unido y la UE, no una piedra en el camino hacia el acuerdo.
Este es nuestro firme compromiso.
Presidente, en nuestra opinión, el Brexit es un acontecimiento negativo para toda Europa.
Un Brexit sin acuerdo para una salida ordenada y pactada sería incluso peor para todo el continente.
Y, para nosotros, Presidente, el Brexit es tan mala idea ahora como cuando era solo una teoría en el momento del referéndum.
Pero para nosotros sigue siendo mejor que permanezcamos junto al Reino Unido a pesar del Brexit.
Ya lo hemos hecho en el pasado y seguiremos haciéndolo en el futuro.
Comunicado original en inglés, en PDF adjunto.
Nota a redactores:
Esta es una traducción realizada por la Oficina de Información de Gibraltar. Algunas palabras no se encuentran en el documento original y se han añadido para mejorar el sentido de la traducción. El texto válido es el original en inglés.
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